Estalle en beso el perfume,
de una estrella enamorada,
vertiendo soplos de dulzura,
los revueltos corazones,
de la agonía de tus labios,
de una rosa adormecida...
en el crepúsculo de un sueño,
late el rubor de lo imposible, estrellándose
en mis manos, los pecíolos de la aurora,
que incendió la dulce flora, de corazones que
te adoran
de una estrella enamorada,
vertiendo soplos de dulzura,
los revueltos corazones,
de la agonía de tus labios,
de una rosa adormecida...
en el crepúsculo de un sueño,
late el rubor de lo imposible, estrellándose
en mis manos, los pecíolos de la aurora,
que incendió la dulce flora, de corazones que
te adoran
Hay un inconfesable laberinto hacia el olvido,
el gemir de las alondras junto al umbral de lo prohibido
el gemir de las alondras junto al umbral de lo prohibido
Hay universos y galaxias de chocolate y gomaespuma,
navegando en los navíos de pasiones sin final
navegando en los navíos de pasiones sin final
Hay una estrella, dulce estrella, el arcoiris de mi olvido,
que tiñó las hojas secas con el color de lo prohibido,
mientras mis labios languidecen y el crudo invierno es el testigo,
que vio arrasar mis grises penas,
ese huracán de tus latidos.
que tiñó las hojas secas con el color de lo prohibido,
mientras mis labios languidecen y el crudo invierno es el testigo,
que vio arrasar mis grises penas,
ese huracán de tus latidos.
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